domingo, 2 de agosto de 2015

La teoría de la casa viviente.

Imaginemos un mundo donde ciertos objetos fueran observadores de su alrededor, donde tuvieran sentimientos y fueran capaces de reflexionar. Por ejemplo las casas; casas que echasen de menos a sus dueños en largas ausencias, que aun incapaces de expresar, tuvieran la capacidad de observar las personas que viven en su interior.
Supongamos que nuestra casa tuviera esta capacidad ¿qué pensaría de ti? 
Igual nuestras respuestas no son tan diferentes.


1 comentario:

  1. En mi caso, mi habitación pensaría que soy una autómata desde que suena el despertador hasta que cierro los ojos. Puag!!!

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